El ajedrez es un juego de estrategias llevado a cabo en un tablero, que como la vida, tiene claros y oscuros y cuyo objetivo, tal cual sucede en la política, parecería perseguir el poder.
Este maravilloso juego, que según la leyenda fue un regalo hecho por Sissa al rey hindú Sheran, tiene en los peones a las fuerzas de avance que van por delante para enfrentar del modo más directo posible al enemigo de turno, estas fichas constituyen lo que llamaríamos en lenguaje coloquial: "carne de cañón".
Este peón, cuya influencia es mínima porque únicamente avanza un cuadro cada vez y mata solamente cuando alguien está a su alcance a un cuadro y en diagonal, constituye la unidad de mayor presencia en el tablero y se ubica a inicio de la partida delante de los rangos más fuertes en una suerte de protección. Son, por conclusión lógica, sacrificables.
En la línea más protegida están otras fichas, de mayor rango y con mayor fuerza, que resultan más dolorosas de perder para quien juega y que son los que menos se arriesgan a la hora de la verdad: dos torres, dos caballos, dos alfiles, un rey y una reina; completan el cuadro de la élite.
El ajedrez, si bien es un juego, refleja lo que sucede (y ha venido sucediendo desde siempre) en los pasillos del poder. En este tablero enorme y monumental las y los ciudadanos somos simples peones, numerosos en relación con los escasos alfiles, caballos y torres, y más distantes aún de la élite real, pero invariablemente el peón carga el rótulo de sacrificable.
El peón es entonces el que da el pecho, el que luchará por una causa creyéndola suya, y lo más probable será también al que llorarán las viudas y los huérfanos.
En los recientes conflictos que vivimos en el país tuvimos en Cochabamba 13 muertos, 393 heridos y ocho detenidos; La Paz sufrió 16 decesos, 212 heridos y 18 detenidos; Santa Cruz, a su vez, soportó cuatro muertos, 139 heridos y 13 detenidos; Beni tuvo cuatro fallecidos, 150 heridos y 13 detenidos; Potosí sufrió con un muerto, 11 heridos y un detenido; Oruro, 55 heridos y seis detenidos y Pando, un herido y seis detenidos. En total Bolivia sufrió 34 muertos, 832 heridos y 54 detenidos.
¿Cuántos de éstos fueron peones y cuántos formaban parte de la jerarquía de un frente o del otro?, ¿cuánto había de estrategia y cuánto de espontaneidad?, ¿qué era verdad y que fue mentira?, ¿fuiste peón o fuiste estratega?, ¿serviste de escalera para que otro haga su jugada o realmente jugabas tú?, ¿te arriesgaste a morir por alguien que no tiene el más mínimo interés en ti?, ¿cuán buen jugador eres?
Un viejo proverbio chino dice: “La vida es como un juego de ajedrez, cambia con cada movimiento”,y al parecer tiene razón, pero ¿realmente sabemos nosotros para quién jugamos?
(Imagen tomada de: https://www.chess.com/es/article/view/5-claves-para-construir-tu-repertorio-de-aperturas)
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